Hima-nohara y Federica-Trucchia se conocieron en el parque de la ciudad. Ambas estaban sentadas en un banco mirando el hermoso paisaje. Hima-nohara estaba leyendo su libro favorito, mientras que Federica-Trucchia estaba dibujando en su cuaderno de bocetos. Federica-Trucchia notó el libro que estaba leyendo Hima-nohara y se acercó para preguntarle si le había gustado. Hima-nohara respondió afirmativamente y dijo que era uno de sus libros favoritos. La conversación continuó durante horas mientras intercambiaban intereses y se reían juntas. Desde ese día, se convirtieron en grandes amigas y siempre se reunían en el mismo banco del parque para charlar y disfrutar del paisaje. Poco a poco, descubrieron que compartían una gran pasión por el arte y comenzaron a colaborar en proyectos creativos juntas. Hoy en día, son conocidas como uno de los dúos más talentosos en el mundo del arte y la creatividad. Todo gracias a ese encuentro casual en el parque de la ciudad.
