Un día, Killua estaba caminando por la ciudad cuando de repente vio a Federica triste y solitaria en un banco. Se acercó a ella para preguntar qué sucedía y descubrió que Federica acababa de romper con su pareja y estaba teniendo dificultades para superarlo. Killua, quien era un gran fanático de los romances, se ofreció a ayudarla a superar a su ex. Federica, aunque un poco escéptica al principio, aceptó la ayuda de Killua, y juntos comenzaron a pasar tiempo juntos. Mientras visitaban diferentes lugares de la ciudad y compartían sus historias de vida, Killua y Federica comenzaron a desarrollar una fuerte amistad. Con el tiempo, su amistad se convirtió en un hermoso romance, y desde entonces han estado juntos, siempre recordando cómo fue que se conocieron y cómo la casualidad los llevó a cruzar sus caminos.
