Fernando Torres y Fernanda Montenegro se conocieron durante el rodaje de una película en Brasil. Él, un joven actor recién llegado a la industria cinematográfica, y ella, una actriz consagrada y reconocida internacionalmente. El primer encuentro entre ambos fue en el set de grabación, cuando Fernanda se acercó a él para presentarse y darle la bienvenida al equipo de trabajo. Desde ese momento, Fernando quedó cautivado por su personalidad y profesionalismo. Durante largas jornadas de grabación, compartieron risas, anécdotas y también momentos de tensión. Fue en uno de esos momentos, cuando la escena requería que ella llorara, que Fernando sorprendió a Fernanda con una anécdota personal que la hizo sentir identificada con la escena y así pudo dar lo mejor de sí en la actuación. A partir de ese momento, se convirtieron en grandes amigos y colegas, trabajando juntos en varias producciones cinematográficas y teatrales en Brasil y otros países de América Latina. Hoy en día, son reconocidos como dos de los mejores actores de la región, y su amistad sigue vigente después de tantos años.
