Hannah y Arthur se conocieron cuando ambos estaban de vacaciones en la playa. Mientras tomaban el sol en la arena, el balón de fútbol de Arthur chocó con un castillo de arena que Hannah estaba construyendo. Como resultado del impacto, el castillo de arena se derrumbó y ambos se enfadaron al principio. Sin embargo, pronto comenzaron a hablar y descubrieron que tenían mucho en común. Desde ese momento, pasaron toda su estancia en la playa juntos y, aunque vivían a unos cientos de kilómetros de distancia, comenzaron a mantener contacto por teléfono y redes sociales. Frank, Christian, y Marx se conocieron en un concierto de rock. Todos ellos eran fanáticos de la misma banda y se encontraron en la primera fila. Durante el concierto, comenzaron a hablar y a disfrutar de la música juntos. Al finalizar el concierto, intercambiaron números de teléfono y comenzaron a salir juntos a más conciertos y festivales. Con el tiempo, se dieron cuenta de que no solo compartían la misma pasión musical, sino también intereses similares en otras áreas y se convirtieron en amigos cercanos que se apoyaban mutuamente en todo.
