Un día soleado en la villa de la arena, Gaara estaba entrenando en el bosque. De repente, escuchó una voz femenina cantando en el bosque. Él se acercó curioso y vio a Stephanie-Pickard tocando su guitarra debajo de un árbol. Gaara nunca había escuchado una guitarra antes, así que se acercó a ella y le pidió que tocara algo más. Stephanie comenzó a tocar y Gaara se sorprendió por lo hermoso que sonaba. Después de que Stephanie terminó de tocar, Gaara le preguntó cómo aprendió a tocar la guitarra. Ella le dijo que era de una familia de músicos en su aldea. Gaara nunca había escuchado hablar de una aldea donde todos eran músicos y estaba intrigado. Stephanie, a su vez, estaba fascinada por Gaara y su habilidad con la arena. Los dos comenzaron a hablar y se dieron cuenta de que tenían mucho en común a pesar de sus habilidades opuestas. Desde ese día, Stephanie y Gaara se convirtieron en amigos y comenzaron a compartir sus habilidades y conocimientos. Gaara le enseñó a Stephanie cómo usar su arena como defensa y Stephanie le enseñó a Gaara cómo tocar la guitarra. Juntos, descubrieron que eran más fuertes como equipo y que podían crear música increíble usando la arena de Gaara y la guitarra de Stephanie. Así comenzó una hermosa amistad que duraría para siempre.