Garrion-Davis e I-Juana-E-Tchu se conocieron en una feria de animales exóticos en la jungla del Amazonas. Garrion estaba cautivado por la belleza de los seres mágicos que habitan en la selva y no podía apartar sus ojos de un tucán multicolor que estaba en una jaula al lado de la suya. I-Juana-E-Tchu, una hechicera y experta en animales, notó la curiosidad de Garrion y se acercó a él para ofrecerle una explicación sobre la magia que envolvía a esas criaturas deliciosamente peculiares. Las chispas saltaron de inmediato y se dieron cuenta de que compartían la misma pasión por la naturaleza y la magia, lo que los unió instantáneamente. Desde entonces, han trabajado juntos para proteger a los animales mágicos del mundo de los cazadores furtivos y han creado un vínculo estrecho por los años dedicados a su lucha por una causa noble.