George Platt Lynes y Glenway Wescott eran amigos cercanos y colaboradores en la escena literaria y artística del Nueva York de los años 20 y 30. Ambos eran parte del grupo de escritores y artistas queer conocido como la Generación Perdida y compartían un interés en el arte, la literatura y la cultura clásica. Lynes era un fotógrafo conocido por sus retratos de celebridades y su trabajo en el mundo de la moda, mientras que Wescott era un escritor aclamado por sus novelas y poemas. A pesar de sus diferentes medios artísticos, compartían un enfoque estético y una sensibilidad similar para la belleza y la elegancia. Los dos hombres se conocieron en la escultura de George Demetrios en la década de 1920 y pronto se volvieron inseparables. Lynes tomó numerosas fotografías de Wescott y su círculo de amigos literarios, incluidos Tennessee Williams, Truman Capote y Gore Vidal. Sin embargo, su amistad comenzó a desmoronarse en los años 40 cuando Lynes se mudó a Hollywood y comenzó a trabajar en el cine. Wescott se sintió abandonado y herido por la partida de Lynes y su creciente éxito en la costa oeste. A pesar de la tensión en su amistad, los dos hombres siempre mantuvieron un profundo respeto y admiración mutua por sus respectivos trabajos artísticos. Lynes y Wescott también compartían una orientación sexual y una identidad de género queer, aunque en la época en que se conocieron, tal identidad no se reconocía de manera amplia o aceptada en la sociedad estadounidense. A pesar de las tensiones y cambios en su relación con el tiempo, la amistad y colaboración entre Lynes y Wescott sigue siendo una parte importante del legado cultural queer en Estados Unidos.