George Sand y Marie Dorval tuvieron una relación sentimental en la Francia del siglo XIX. Sand, quien era una escritora y activista política famosa por su estilo de vida poco convencional, conoció a Dorval en 1834 cuando ésta estaba actuando en una obra que había escrito Sand. Dorval era una actriz de teatro que se había labrado una reputación como una intérprete talentosa y con un cierto magnetismo personal. Sand se sintió atraída por su personalidad y su aparente desapego por la decoración social de la época. La relación entre ambas mujeres se intensificó rápidamente y Sand llegó a considerar a Dorval como su alma gemela. La relación de Sand y Dorval no fue aceptada por la sociedad francesa de la época, que consideraba inapropiado cualquier tipo de relación amorosa entre mujeres. Además, Sand estaba casada con el barón Casimir Dudevant, lo que hacía que su relación con Dorval fuera aún más polémica. A pesar de la oposición social, Sand y Dorval mantuvieron su relación durante varios años. Dorval actuó en varias obras de teatro escritas por Sand y ésta le dedicó varios poemas y novelas. Sin embargo, la intensidad de su relación comenzó a disminuir a medida que Dorval se alejaba del teatro y Sand se involucraba cada vez más en la política. A pesar de haber terminado su relación sentimental, Sand y Dorval mantuvieron una amistad cercana hasta la muerte de ésta última en 1849. Sand escribió una carta emotiva a su amiga en la que expresaba su dolor por su pérdida y su cariño hacia ella. La relación entre George Sand y Marie Dorval es considerada una de las primeras relaciones lesbianas documentadas en la historia de Francia.
