Ginny Simms y Don Eastvold se conocieron en un elegante restaurante de Nueva York. Ginny estaba de vacaciones en la ciudad y Don estaba en un viaje de negocios. Sus mesas estaban una al lado de la otra y comenzaron a conversar casualmente mientras esperaban su comida. Descubrieron que ambos tenían una pasión por la música y comenzaron a hablar sobre sus bandas favoritas. Ginny mencionó que era cantante y Don estaba impresionado por sus habilidades. Después de la cena, Don la invitó a asistir a su concierto esa noche y Ginny aceptó. Al final de la noche, Don le pidió su número y comenzaron a salir juntos durante el resto de las vacaciones de Ginny. Después de eso, Don se trasladó a California para estar más cerca de Ginny y finalmente le propuso matrimonio en la playa de Malibú. El resto es historia.