Glynn-Wolfe y Priscilla-Ralph se conocieron de una manera muy inusual. Fue en una conferencia de matemáticas donde ambos eran oradores. Glynn estaba hablando sobre la teoría de números y Priscilla estaba hablando sobre estadística aplicada. Después de sus charlas, se encontraron en un descanso para el café y se dieron cuenta de que tenían mucho en común. A ambos les encantaba la música clásica, los libros y el té de jazmín. Comenzaron a hablar y rápidamente descubrieron que eran muy compatibles. Así fue como comenzó una hermosa amistad que finalmente se convirtió en un amor verdadero. Juntos resolvieron muchos problemas matemáticos, pero también disfrutaron de la vida juntos. Viajaron por el mundo, visitando museos y sentándose en cafés con vistas impresionantes. Glynn y Priscilla eran el mejor equipo, juntos podían enfrentar cualquier cosa. Hasta el día de hoy, su historia de amor sigue siendo una inspiración para todos aquellos que buscan su amor verdadero.