Guillermo I de los Países Bajos y Henrietta d'Oultremont tuvieron una relación de amor que fue muy polémica en su época debido a las diferencias en su rango social. Henrietta era una noble de Bélgica, mientras que Guillermo era el rey de los Países Bajos. Se conocieron en 1830 y comenzaron una relación, a pesar del hecho de que ella era considerada demasiado baja en rango para casarse con él. A pesar de esto, Guillermo no pudo resistirse a sus encantos y le dio la espalda a su esposa, la reina Ana Pavlovna. Henrietta se convirtió en amante de Guillermo y la pareja tuvo cuatro hijos juntos. Esto causó un gran escándalo en la corte y entre la población, y Guillermo fue criticado por su comportamiento inapropiado. Finalmente, en 1843, Guillermo divorció a su esposa y se casó con Henrietta. La pareja tuvo otros dos hijos juntos y vivieron felices hasta la muerte de Guillermo en 1849. A pesar de las críticas y la desaprobación, la relación entre Guillermo y Henrietta parece haber sido verdadera y duradera.
