Henry IV de Francia y Anne de Cambefort tuvieron una relación de amantes durante la juventud del rey. Anne de Cambefort era una joven noble que se casó con un hombre rico y mayor que ella, pero su matrimonio fue desafortunado y Anne se convirtió en amante de Henry IV. La relación fue breve pero intensa, y Anne se convirtió en una influencia importante en la vida del rey. Se dice que fue ella quien introdujo a Henry IV a la poesía de Pierre de Ronsard y a la filosofía epicúrea. Sin embargo, la relación terminó cuando Anne se casó con otra persona. Aunque Henry IV nunca volvió a tener una relación amorosa como la que tuvo con Anne, siempre la recordó con cariño y se mantuvo en contacto con ella a lo largo de los años. A pesar de que la relación de Henry IV y Anne de Cambefort fue considerada como algo escandaloso en su época, la pareja sigue siendo recordada como una historia de amor apasionada y fugaz.
