Henry IV de Francia y Margarita de Valois tuvieron una relación controvertida y llena de altibajos. Aunque estuvieron casados durante seis años, su matrimonio fue en gran parte infeliz. Margarita, también conocida como "La Reina Margot", era hija de Enrique II de Francia y Catalina de Médici y fue famosa por ser una belleza y una líder de la moda en la corte. En 1572, a los 19 años, se casó con Henry IV como parte de un intento de unir a las casas reales católicas y protestantes de Francia. Sin embargo, Margarita y Henry IV no se llevaban bien y no estaban enamorados. También había rumores de que Margarita había sido infiel con varios hombres de la corte (y posiblemente incluso con su propio hermano). En 1588, Henry IV se divorció de Margarita y ella se retiró a la vida privada. Luego, se convirtió en una figura importante en los círculos literarios y culturales de París, incluso llegó a ser conocida como "La Reina de París". En su biografía "Memoirs of Marguerite de Valois", Margarita escribió sobre sus experiencias como reina y su vida después del divorcio. A pesar de su matrimonio infeliz, Henry IV y Margarita mantuvieron una relación amistosa después de su divorcio. Ella incluso lo ayudó a reconciliarse con su amante Gabrielle d'Estrées y se dice que se sintió aliviada de ser liberada de las demandas de ser reina y esposa. En resumen, la relación entre Henry IV y Margarita de Valois fue una unión política, pero infeliz, que resultó en un divorcio y una amistad a largo plazo.
