Avril-wilson y J-brown se conocieron en una tarde soleada de primavera en un parque cerca del centro de la ciudad. Ambos estaban paseando sus perros y, de repente, los dos caninos se encontraron y comenzaron a jugar juntos. Esto hizo que Avril-wilson y J-brown se fueran acercando poco a poco, hablando sobre sus perros y compartiendo historias divertidas sobre ellos. Después de un rato, los dos decidieron intercambiarse los números de teléfono y quedaron en volver a salir al parque otro día, para que sus perros pudieran jugar juntos otra vez. Desde entonces, Avril-wilson y J-brown se han hecho buenos amigos y comparten muchas aventuras juntos con sus fieles compañeros caninos.
