Britney-Stevens y Jack-Venice se conocieron en una fiesta en la playa. Britney estaba disfrutando del sol y la arena con sus amigas cuando vio a un chico guapo jugando al voleibol cerca de ellas. No podía apartar los ojos de él y decidió acercarse para unirse al juego. Jack notó a Britney como de la nada, y quedó impresionado por su habilidad en el voleibol. Después de terminar el juego, decidieron ir a tomar algo juntos en un bar cercano. Mientras charlaban, descubrieron que tenían muchas cosas en común, como su amor por la música y las películas de terror. La noche siguió adelante y acabaron bailando bajo las estrellas en la playa. Desde ese día, Britney y Jack no se separaron, se convirtieron en una pareja inseparable y siempre recordaban ese momento como el día en que se encontraron el uno al otro.