Jackson Browne y Phyllis Major se conocieron en una cafetería local en Los Ángeles. Ambos estaban esperando en la fila para pedir su café cuando Jackson notó que Phyllis estaba cantando la canción de Joni Mitchell "Both Sides Now". Impresionado por su voz, Jackson se acercó a ella y comenzó a hablarle sobre música y sus propias canciones. Pronto descubrieron que tenían mucho en común, incluyendo la pasión por la música y la creencia en la justicia social y los derechos humanos. Comenzaron a salir juntos y eventualmente se mudaron juntos en una pequeña casa en Echo Park. Durante su relación, Phyllis fue una gran inspiración para Jackson y lo alentó a seguir escribiendo música significativa y conmovedora. Aunque su relación terminó, la conexión que compartieron a través de su amor por la música duró para siempre.