Jacqueline Bisset y Jon Peters tuvieron una relación en la década de 1980. Peters era un productor de cine y había trabajado en películas como Superman y The Color Purple. Bisset, por su parte, era una actriz conocida por sus roles en películas como Bullitt y Murder on the Orient Express. La relación entre Bisset y Peters fue breve pero intensa. Se conocieron en el set de la película Rich and Famous en 1981 y comenzaron a salir poco después. Peters era conocido por ser un playboy y un mujeriego, lo que causó preocupación en algunos de los amigos cercanos de Bisset. Sin embargo, ella parecía estar feliz en la relación y llegó a decir en una entrevista que Peters era "un hombre interesante y complejo". La pareja duró unos pocos años antes de separarse. Bisset continuó actuando en películas y televisión, mientras Peters siguió produciendo películas y también se convirtió en un exitoso empresario en el mundo de la moda. A pesar de su corta relación, la pareja estuvo en el centro de la atención de los medios en esa época. Se hablaba sobre su vida amorosa y su vida pública, lo que hizo que estuvieran en la mira de la prensa de Hollywood en muchas ocasiones. Hoy en día, Bisset sigue trabajando en la industria del cine y ha ganado reconocimiento por su carrera en Europa. Peters también sigue trabajando en el mundo del cine y ha producido películas como A Star is Born y Batman Returns. Aunque su relación ya no existe, los dos han dejado su huella en la historia de Hollywood.
