Jacqueline de Croisset y Yul Brynner tuvieron una relación romántica en la década de 1970. Se conocieron mientras Brynner estaba trabajando en un espectáculo en el Teatro Marigny de París, donde de Croisset era la productora. Comenzaron a salir juntos y se convirtieron en una pareja muy pública en la escena social de París. De Croisset fue una figura importante en la vida de Brynner; se dice que ella lo ayudó a superar su adicción al tabaco y lo llevó a adoptar un estilo de vida más saludable. También lo acompañó en sus giras teatrales y en sus viajes por Europa. Sin embargo, la relación entre de Croisset y Brynner no duró mucho tiempo. Brynner finalmente se alejó de ella y se comprometió con otra mujer, una coreana llamada Kathy Lee, con quien se casó en 1983. Después de la muerte de Brynner en 1985, de Croisset habló públicamente sobre su relación con el actor, revelando detalles íntimos sobre su vida juntos. También escribió un libro sobre su experiencia titulado "Yul: The Man Who Would Be King".