Un día, Janeane Garofalo estaba caminando por las calles de Nueva York cuando se topó con Pete Caldes en una cafetería. Pete estaba sentado en una mesa cercana, leyendo un libro. Janeane, que había sido fan de Pete desde hace mucho tiempo, no pudo resistir la tentación de acercarse y hablar con él. Comenzaron a charlar mientras bebían café, y rápidamente se dieron cuenta de que tenían mucho en común. Descubrieron que compartían el mismo sentido del humor y una pasión por la música. Después de esa primera reunión casual, Janeane y Pete comenzaron a salir regularmente. Salían juntos a conciertos y eventos culturales, y pasaban horas hablando sobre todo, desde política hasta el último episodio de su serie de televisión favorita. Ahora, años después, Janeane y Pete siguen siendo buenos amigos y colaboradores creativos. Les encanta recordar cómo se conocieron en aquella cafetería casual, y están agradecidos por el destino que los unió.