Princess-Ariel estaba caminando por la playa cuando de repente vio a una chica tomándose fotos de las olas cerca de la orilla. Intrigada por su pasión por la fotografía, se acercó a la chica y comenzaron a hablar. La chica se presentó como Janelle-Schneider y resultó ser una fotógrafa talentosa de paisajes marinos. Princess-Ariel, también amante del mar, se sintió inmediatamente conectada con Janelle-Schneider y comenzaron a compartir historias sobre sus experiencias en el agua. Así que decidieron caminar juntas por la playa, y después de un tiempo, Janelle-Schneider habló sobre su proyecto nuevo de fotografía y le preguntó a Princess-Ariel si le gustaría ser su modelo. Princess-Ariel estaba emocionada y aceptó la oferta, lo que llevó a comenzar una colaboración en la que trabajaron juntas durante varios días para capturar la belleza del mar y toda su grandeza en las fotografías. Desde ese momento, Princess-Ariel y Janelle-Schneider se convirtieron en grandes amigas, y juntas siguieron explorando las maravillas del mar y creando nuevas imágenes hermosas y fascinantes.
