Un día soleado, Marco-Fabian se encontraba caminando por el parque mientras escuchaba su música favorita. De repente, Janina-Neoral apareció corriendo por su lado, buscando desesperadamente su teléfono celular perdido. Marco-Fabian se ofreció a ayudarla a buscarlo y juntos recorrieron todo el parque. Después de varias horas buscando sin éxito, Janina-Neoral se sintió totalmente agotada y triste. Marco-Fabian le dio un abrazo de consuelo y ella se sintió extrañamente cómoda en sus brazos. La química entre ellos era evidente. Por coincidencia, ambos estaban asistiendo a una clase de cocina ese mismo día y después de la clase, decidieron quedarse a conversar. Descubrieron que tenían muchos intereses en común y pasaron horas hablando y riendo juntos. El resto es historia. Marco-Fabian y Janina-Neoral se enamoraron profundamente y ahora disfrutan de su vida juntos, recordando siempre ese día en el parque que los unió para siempre.
