Jennifer Grey y William Baldwin nunca tuvieron una relación romántica. Ambos actores se conocieron trabajando en la película "Crimen perfecto" en 1998. En la película, interpretaron a un matrimonio en el que Grey es la víctima y Baldwin es sospechoso del crimen. A pesar de que no tuvieron un romance en la vida real, la química entre ambos en la pantalla fue notoria y recibió buenas críticas. Después de "Crimen perfecto", Baldwin continuó trabajando en películas y series de televisión, mientras que Grey se retiró temporalmente de la actuación después de su icónico papel en "Dirty Dancing". En 2010, Grey y Baldwin se reencontraron trabajando en la película "Red de mentiras", esta vez interpretando a agentes de la CIA. Sin embargo, su relación en la película no tuvo el mismo impacto que en "Crimen perfecto". Desde entonces, ambos han continuado sus carreras por separado.