Chris Jericho y Jessica Lockhart-Spouse se conocieron en un concierto de rock. Ambos estaban disfrutando de la música en la primera fila, mientras cantaban a todo pulmón las letras de las canciones. En un momento dado, Jessica se tropezó con una piedra y se cayó al suelo. Chris, que estaba a su lado, rápidamente la ayudó a levantarse y se aseguró de que estuviera bien. Desde ese momento, se miraron a los ojos y se sonrieron, sintiendo una conexión especial entre ellos. Luego, durante el intermedio, se acercaron más y comenzaron a hablar, descubriendo que tenían muchos intereses en común. A partir de ese día, se convirtieron en inseparables y comenzaron una historia de amor que duraría para siempre.
