Jillian y Jeremy se conocieron en un café en el centro de Nueva York, mientras ambos disfrutaban de una tarde soleada. Jillian, al ver a Jeremy, no pudo evitar mirarlo fijamente por su increíble atractivo y carisma. Jeremy, por su parte, también quedó impresionado con ella y se acercó a presentarse. Al poco tiempo, comenzaron una conversación amena y divertida, descubriendo que tenían muchas cosas en común, como su amor por el cine y la literatura clásica. Desde entonces, se hicieron inseparables y comenzaron un romance lleno de aventuras y pasión. Ahora, años después, siguen juntos y felices, recordando ese primer encuentro casual que cambió sus vidas para siempre.
