Jim Morrison y Lynn Krieger tuvieron una relación sentimental en la década de 1960. Krieger fue presentada a Morrison por su hermano, Robby Krieger, guitarrista de la banda de Morrison, The Doors. La pareja vivió junta durante un tiempo en una casa en Laurel Canyon, en Los Ángeles. Sin embargo, la relación estuvo plagada de altibajos, ya que Morrison era conocido por su comportamiento autodestructivo y sus constantes infidelidades. Krieger fue una fuente de inspiración para Morrison y algunos de sus trabajos incluyen referencias a su relación. En la canción "Love Street", Morrison escribió sobre la casa en la que vivían juntos en Laurel Canyon, y en "Queen of the Highway", describió a Krieger como una figura mística. La relación llegó a su fin en 1969, cuando Morrison comenzó a salir con Pamela Courson. Sin embargo, Krieger y Morrison siguieron siendo amigos hasta la muerte del cantante en 1971.
