Jim Morrison y Mary Werbelow tuvieron una relación tumultuosa desde 1966 hasta su separación en 1968. Werbelow era una estudiante universitaria en Los Ángeles y trabajaba como mesera en el club Whisky a Go Go, donde The Doors solían tocar. Fue allí donde conoció a Morrison y comenzaron a salir. Su relación fue en gran parte marcada por la infidelidad de Morrison, quien tenía múltiples amantes y una fuerte adicción a las drogas. Werbelow trató de apoyarlo en sus momentos más oscuros, pero al final, no pudo lidiar con su estilo de vida indulgente. A pesar de su separación, Werbelow tenía sentimientos profundos por Morrison y siempre lo recordaba con cariño. Después de la muerte de Morrison en 1971, Werbelow recibió una llamada telefónica anónima que le informaba sobre su fallecimiento. Esto la dejó en shock e incredulidad. En los años siguientes, Werbelow se negó a hablar públicamente sobre su relación con Morrison y mantuvo su vida privada. Sin embargo, en una entrevista de 2013 con la revista Rolling Stone, reveló algunos detalles sobre su romance con el legendario cantante de The Doors y cómo la relación influyó en su vida.
