Joan Crawford y Russell Nype se conocieron en la década de 1950, cuando ambos trabajaron juntos en la producción de Broadway "Goodbye, My Fancy". Crawford estaba en la cima de su carrera cinematográfica, mientras que Nype era un talentoso actor de teatro. A pesar de que Crawford tenía una reputación de ser difícil con sus compañeros de trabajo, ella y Nype se hicieron buenos amigos durante la producción de la obra. Crawford solía invitar a Nype a cenar en su casa y a menudo le hablaba sobre su vida personal y sus problemas. Sin embargo, la amistad de Crawford y Nype se puso a prueba cuando ella comenzó a tener problemas de salud mental y a abusar del alcohol. En una ocasión, Crawford llegó a pedirle a Nype que la ayudara a suicidarse, pero él se negó a hacerlo y la convenció de buscar ayuda profesional. A pesar de los altibajos en su relación, Crawford y Nype mantuvieron su amistad por muchos años. Cuando Crawford murió en 1977, Nype asistió a su funeral y se aseguró de que una estrella del cine recibiera un entierro digno.