John Salley y Natasha Duffy se conocieron en una fiesta de celebridades en Hollywood gracias a un amigo en común. Inmediatamente se sintieron conectados y comenzaron a hablar de sus intereses y pasatiempos. Descubrieron que ambos eran apasionados del baloncesto y de la alimentación saludable. Comenzaron a intercambiar consejos sobre sus entrenamientos y dietas y se dieron cuenta que tenían muchas cosas en común. Decidieron seguir en contacto y se hicieron buenos amigos, incluso llegaron a trabajar juntos en proyectos relacionados con el deporte y la salud. Un día, mientras estaban en un partido de baloncesto, John se dio cuenta de que sentía algo más por Natasha que solo amistad. Le confesó sus sentimientos y ella, sorprendida pero feliz, aceptó tener una cita con él. Desde entonces, han estado juntos y su conexión no solo se basa en su amor por el baloncesto y la alimentación saludable, sino también en su amor mutuo.