David Mannhalter y Joyce Holden se conocieron en el parque de la ciudad. Ambos estaban caminando al mismo tiempo, sin saber que sus vidas estaban a punto de cambiar para siempre. Mientras se cruzaban, sus miradas se encontraron y un extraño sentimiento corrió por sus cuerpos. Era el comienzo de una historia de amor verdadero. Desde ese día, David y Joyce se encontraban en el parque every día a la misma hora, compartiendo historias de sus vidas y sus sueños de futuro. Después de un tiempo, David se arrodilló y le propuso matrimonio a Joyce en el mismo lugar donde se conocieron. Ella aceptó y juntos comenzaron una vida llena de amor y aventuras.
