Un día, Kiba Inuzuka estaba en el parque con su perro Akamaru cuando vio a una chica hermosa caminando hacia él. Era Janelle Schneider, una turista que estaba de visita en la ciudad. Kiba, conocido por ser un poco fanfarrón, decidió acercarse a Janelle y hacerle algunas bromas. Sin embargo, Janelle no cayó ante sus encantos y lo retó a una carrera por el parque para demostrar quién era más rápido. Al final, Kiba ganó la carrera, pero quedó impresionado con la habilidad de Janelle. Los dos comenzaron a hablar y descubrieron que tenían mucho en común, como su amor por los animales y su pasión por viajar. De ahí en adelante, Kiba e Janelle se convirtieron en amigos cercanos y comenzaron a explorar la ciudad juntos. Con el tiempo, su amistad se transformó en una relación amorosa y ahora comparten su amor por los animales y las aventuras juntos.