Jameika y Kobe se conocieron por casualidad, en una tarde lluviosa en un café en el centro de Los Ángeles. Mientras esperaban sus órdenes en la barra, Jameika notó el anillo de campeonato que Kobe llevaba en su dedo. Al instante, ella se dio cuenta de que estaba parado junto a uno de los jugadores de la NBA más famosos de todos los tiempos. Kobe notó la mirada de admiración en los ojos de Jameika y decidió presentarse. Los dos comenzaron a hablar y rápidamente se dieron cuenta de que compartían muchas pasiones, incluyendo la música, los deportes y la moda. Comenzaron a salir juntos y a explorar la ciudad juntos, ocasionalmente asistían a eventos y fiestas juntos. A pesar de que venían de mundos muy diferentes, la amistad entre Jameika y Kobe creció rápidamente. Se apoyaron mutuamente a través de los buenos y malos momentos y se convirtieron en una fuente constante de inspiración el uno para el otro. Años más tarde, cuando Kobe falleció trágicamente, Jameika recordó aquel primer encuentro y lo agradecida que estaba por haber conocido a uno de sus amigos más cercanos.
