La relación entre John Wayne Bobbitt y Kristina Elliott fue muy tumultuosa y terminó en violencia doméstica. En 1993, Bobbitt se hizo famoso por un incidente en el que su esposa, Lorena Bobbitt, lo castró mientras él dormía. Después del juicio y la condena de Lorena, John aprovechó su fama para emprender diferentes proyectos, incluyendo una carrera en la industria pornográfica. En 1994, John conoció a Kristina Elliott, una stripper de Las Vegas. Comenzaron una relación y se casaron en 1996. La relación fue muy inestable y violenta, con ambos acusándose mutuamente de abuso emocional y físico. En 1997, Kristina Elliott fue arrestada y acusada de apuñalar a John durante una pelea. Fue condenada por agresión agravada y sentenciada a cinco años de libertad condicional y tratamiento para el abuso de sustancias. Después del incidente, John solicitó el divorcio y la pareja se separó definitivamente. John ha seguido con su carrera en la industria pornográfica y ha tenido varios problemas legales, mientras que Kristina ha tratado de alejarse de la vida pública.
