Lady Gaga (Stefani Joanne Angelina Germanotta) y Robert Fusari tuvieron una relación profesional en el año 2006, cuando ella era una cantante emergente en Nueva York. Fusari, un productor musical, descubrió a Gaga y la ayudó a desarrollar su estilo musical y personalidad artística. Juntos trabajaron en el álbum "Red and Blue", que fue lanzado en el 2006. Sin embargo, su relación no duró mucho tiempo. En el año 2007, Fusari presentó una demanda contra Gaga por 30 millones de dólares, alegando que ella lo había traicionado y le debía una comisión por su trabajo en el álbum. Gaga negó las acusaciones y respondió con una demanda de 1,7 millones de dólares contra Fusari, alegando que él la había engañado y manipulado. Ambas demandas fueron finalmente resueltas fuera de los tribunales en el 2010, con un acuerdo confidencial entre las partes. Desde entonces, Gaga ha hablado públicamente sobre la experiencia y ha dicho que aprendió lecciones valiosas sobre el negocio de la música y las relaciones profesionales. En resumen, la relación entre Lady Gaga y Robert Fusari fue de colaboración en el desarrollo de su carrera musical, pero terminó en una disputa legal que fue resuelta fuera de los tribunales.
