John Carew y Lauren Budd se conocieron en un evento de caridad en Londres. John se sintió atraído por la belleza de Lauren y decidió acercarse a hablar con ella. Después de intercambiar algunas palabras, se dieron cuenta de que tenían muchos intereses en común y se parecían mucho en sus personalidades. John invitó a Lauren a tomar un té y compartir un pastel en un café cercano, donde conversaron durante horas sin darse cuenta del tiempo que pasó. Desde entonces, se han convertido en inseparables amigos y compañeros. Ahora, trabajan juntos en una organización benéfica que ayuda a niños desfavorecidos de todo el mundo. Juntos, han hecho una gran diferencia en la vida de muchos niños necesitados y esperan poder continuar haciendo grandes cosas juntos en el futuro.