Un día, Lil Wayne estaba grabando una canción en el estudio de grabación. Kiely Williams, quien estaba grabando en un estudio cercano, escuchó la música y se sintió atraída por ella. Decidió investigar de dónde venía la música y se topó con el estudio de Lil Wayne. Al entrar en el estudio, se encontró cara a cara con Lil Wayne y comenzaron a hablar. Descubrieron que tenían mucha química y comenzaron a trabajar juntos en una canción. La canción fue un éxito rotundo y desde entonces, Lil Wayne y Kiely Williams son grandes amigos y colaboradores.