Un día, Lil Wayne estaba en el estudio grabando su última canción cuando escuchó una melodía que venía de la habitación de al lado. Sintió curiosidad y decidió echar un vistazo. Al entrar, se encontró con Sylver Karatz, un talentoso músico que estaba tocando su guitarra con sutileza. Inmediatamente, Lil Wayne quedó cautivado por la música que emitía la guitarra de Sylver Karatz y le preguntó si estaba dispuesto a colaborar en su próximo álbum. Sylver, al ver la pasión de Lil Wayne por la música, aceptó encantado. Así fue como nació una fuerte amistad y una colaboración musical increíble entre Lil Wayne y Sylver Karatz. Juntos crearon canciones increíbles que han llegado a ser éxitos mundiales. Y hoy, su amistad y colaboración musical sigue más fuerte que nunca.