Lori y Mickey se conocieron en una fiesta en una noche de verano en la ciudad. Ambos se encontraron en la pista de baile, donde la música pop animaba a la gente a moverse enérgicamente. Lori, vestida con un vestido floreado y zapatillas de deporte, estaba bailando sola cuando Mickey, quien llevaba una camiseta sin mangas y pantalones vaqueros desgastados, se acercó y comenzó a bailar con ella. La química entre ellos era evidente, y pronto comenzaron a hablar y reír juntos. Descubrieron que compartían una pasión por la música, la cocina y los viajes. Se volvieron inseparables esa noche, disfrutando del ambiente fiestero y de la compañía del otro. Después de la fiesta, Lori y Mickey intercambiaron números de teléfono y prometieron volverse a ver. Desde entonces, han estado juntos como pareja inseparable, viajando por el mundo y explorando juntos todo lo que la vida tiene para ofrecer. La noche en la que se conocieron siempre recordarán como el inicio de su historia de amor.