Fernando y Lua se conocieron en un bar de la ciudad. Fernando estaba tomando una cerveza y Lua, quien estaba sentada en la mesa de al lado, llamó su atención con su risa. Fernando se acercó a Lua y comenzaron a charlar. Descubrieron que tenían muchas cosas en común, como el amor por la música y los deportes. Pasaron horas hablando y al final de la noche intercambiaron números de teléfono. Desde entonces, han sido inseparables y han compartido muchos momentos felices juntos. Ahora, años después, aún recuerdan con cariño esa noche especial en la que se conocieron en un bar casi por casualidad.
