Tony Oller y Lucy Hale se conocieron en una cafetería de Los Ángeles. Anthony estaba tomando un café cuando Lucy entró y accidentalmente derramó su bebida en el suéter de Tony. A pesar de la situación incómoda, Tony y Lucy comenzaron a hablar y rápidamente descubrieron que compartían una pasión por la música. Después de esa reunión casual, comenzaron a escribir y grabar música juntos y finalmente comenzaron a salir. La música siempre ha sido una parte importante de su relación y continúan colaborando en proyectos musicales juntos.