Luella-k-wintheiser y Tom-fears se conocieron mientras hacían fila para comprar café en una pequeña cafetería en el centro de la ciudad. Al no poder evitar escuchar la conversación de Tom con el barista sobre su banda de rock local, Luella se acercó y comenzó a hacer preguntas sobre su música. La conversación fue fluida, y los dos descubrieron que compartían una pasión por la guitarra eléctrica. Después de intercambiar números de teléfono, Tom invitó a Luella a asistir a su próximo concierto en un club nocturno cercano. Allí, Luella quedó impresionada por el talento de Tom en la guitarra y su voz ronca y poderosa mientras cantaba sus propias canciones originales. Después del concierto, Luella y Tom hablaron durante horas sobre su amor compartido por la música y los viajes que habían realizado para tocar en diferentes lugares. Desde entonces, han sido inseparables y hacen música juntos con la esperanza de algún día hacer una gira por el mundo.
