Luis y Sofía se conocieron en una cafetería en el centro de la ciudad. Él estaba sentado en una mesa trabajando en su computadora y ella entró buscando un lugar para tomar un café caliente. Al ver que todas las mesas estaban llenas, Luis decidió ofrecerle compartir la suya a Sofía. Ella aceptó gustosamente y comenzaron a charlar mientras tomaban sus bebidas. Descubrieron que ambos eran fanáticos de la música y que compartían algunos cantantes y bandas favoritas. Además, les encantaba viajar y conocer nuevos lugares. De repente, comenzó a llover muy fuerte y no pudieron salir de la cafetería. Luis decidió pedir una botella de vino y compartieron una cena improvisada mientras disfrutaban de la música que sonaba en el local. Horas después, la lluvia había cesado y se dieron cuenta de que habían pasado una tarde muy agradable juntos. Acordaron intercambiar números telefónicos y seguir en contacto. Desde entonces, han compartido muchos otros momentos juntos y han creado una relación muy especial.