Mai-Shiranui y Stephanie-Pickard se conocieron en un torneo de artes marciales en Japón. Mai, una reconocida luchadora de kunoichi, estaba compitiendo en el torneo. Por otro lado, Stephanie, una experta en Muay Thai, estaba viendo la competencia desde la tierra del sol naciente. Durante un combate, Mai se enfrentó a un adversario muy fuerte, pero al final, logró vencerlo. Al terminar la pelea, Steph fue hacia Mai para felicitarla por su victoria. Mai estaba impresionada por el conocimiento de Steph sobre artes marciales y su gran habilidad en Muay Thai. Después de algunos días, Mai y Steph se volvieron a encontrar en una cafetería y comenzaron a hablar sobre su pasión por el combate. Descubrieron que tenían mucho en común y comenzaron a entrenar juntas. Con el tiempo, se convirtieron en grandes amigas y compañeras de lucha. Desde entonces, Mai y Steph han participado en muchos torneos juntas, formando una dupla de imbatibles guerreras. Su amistad y habilidades de combate han llevado a ambas a los más altos niveles de fama y reconocimiento en el mundo de las artes marciales.