Hinata y Malese se conocieron en un pasillo del instituto, cuando Hinata tropezó accidentalmente con Malese mientras caminaba distraída. Después de disculparse, Hinata notó que Malese parecía algo triste y decidió hablarle, preguntándole si todo estaba bien. Malese respondió con sinceridad, hablando sobre algunos problemas familiares y escolares que estaba enfrentando. Hinata escuchó atentamente y ofreció palabras de aliento, lo que hizo que Malese se sintiera mejor. A partir de ese día, se hicieron amigas y pasaron tiempo juntas tanto en el instituto como fuera de él. Hinata demostró ser una gran apoyo para Malese y viceversa, y eventualmente se convirtieron en grandes amigas.