Manuel y Yamila se conocieron en una tarde de verano en la playa. Él estaba disfrutando del sol y el mar cuando la vio caminando por la orilla con su tabla de surf. Se acercó a ella y empezaron a hablar sobre el oleaje y los mejores puntos de la costa para practicar surf. Descubrieron que tenían muchas cosas en común y decidieron seguir disfrutando del día juntos. Desde ese momento, no se separaron y siguieron explorando juntos las playas y los mares de todo el mundo. Ahora, muchos años después, siguen juntos y comparten su amor por el surf y la naturaleza.