María Leopoldina de Austria y Pedro I de Brasil tuvieron una relación matrimonial arreglada por las familias reales europeas para unir a los dos territorios diferentes. María Leopoldina de Austria era la hija mayor del emperador Francisco I de Austria y de María Teresa de Nápoles, mientras que Pedro I de Brasil era el hijo heredero del rey João VI de Portugal y de Carlota Joaquina de Borbón. La boda de Pedro y María Leopoldina se celebró en Río de Janeiro el 13 de mayo de 1817 y ambos protagonizaron una gran historia de amor que fue reconocida por la historia. Maria Leopoldina fue una gran aliada en la causa de la independencia de Brasil y fue muy admirada por su belleza, cultura y educación. Su marido, por su parte, fue conocido por su valentía militar y por defender los intereses de Brasil. Juntos tuvieron siete hijos, pero por desgracia, la felicidad de la pareja no duró para siempre. Los rumores de infidelidades de Pedro I alejaron a la pareja poco a poco y en 1826, Pedro se vio obligado a abdicar al trono en favor de su hijo. María Leopoldina falleció el 11 de diciembre de 1826 en un parto complicado, dejando a Pedro devastado por la pérdida de su amada esposa. A pesar del final triste de su historia, Pedro y María Leopoldina siguen siendo recordados como una pareja real que simboliza la unión cultural y política entre dos países diferentes. Su historia de amor se ha convertido en parte de la historia de Brasil y se ha pasado de generación en generación como un ejemplo de amor y sacrificio.
