Aleksei y Marina se conocieron en una fría noche de invierno. Ambos estaban en una fiesta en la casa de un amigo en común. Aleksei estaba en un rincón, hablando con algunos amigos, mientras Marina se encontraba sentada en un sofá, sola y pensativa. De repente, una canción que ambos adoraban comenzó a sonar. Aleksei se levantó de inmediato y comenzó a bailar solo, sin embargo, Marina lo miraba con una sonrisa en su rostro. Después de unos minutos, Aleksei se acercó a ella y la invitó a bailar con él. A partir de ese momento, no se separaron durante toda la noche, hablaron de todo y nada a la vez. Descubrieron que ambos eran apasionados de la música y del arte. Marina estaba encantada con la risa de Aleksei, mientras que él estaba fascinado por su belleza natural. Cuando la fiesta terminó, Aleksei y Marina intercambiaron números telefónicos y comenzaron a salir juntos. Descubrieron que tenían muchos intereses en común y se hacían bien el uno al otro. Hoy en día, muchos años después de aquella noche fría de invierno, Aleksei y Marina siguen juntos y felices. A menudo recuerdan esa noche en la que se conocieron, y siempre se emocionan al recordar cómo fue que llegaron a conocerse.
