Jocelyn y Mario se conocieron en una cafetería. Ella acababa de ordenar su café y estaba buscando una mesa disponible cuando vio a Mario, quien estaba sentado solo en una mesa grande. Decidió preguntarle si podía compartir la mesa y él aceptó amablemente. Comenzaron a conversar mientras bebían sus cafés y descubrieron que tenían muchas cosas en común, desde su amor por la música hasta su pasión por viajar. Se rieron y charlaron durante horas, intercambiando historias y compartiendo sus sueños y metas. Después de esa primera reunión casual, Jocelyn y Mario empezaron a verse con regularidad, disfrutando de cenas juntos, paseos por la ciudad y aventuras espontáneas. Su amistad se convirtió rápidamente en un romance apasionado, y hoy en día son inseparables y se han convertido en la pareja perfecta.
