La relación entre Marcos Pérez Jiménez y Marita Lorenz comenzó en los años 50, cuando éste era presidente de Venezuela y ella una joven de 19 años que viajaba por el Caribe. Lorenz afirmó en varias entrevistas y en su autobiografía, "Marita: los memorias de una espía", que tuvo una relación con el líder venezolano durante varios meses. Sin embargo, la situación se complicó cuando Lorenz se quedó embarazada y Pérez Jiménez le pidió que se hiciera un aborto, a lo que ella se negó. Poco después, recibió amenazas de muerte y fue secuestrada por agentes del gobierno venezolano, quienes la llevaron a un avión con destino a Miami. Durante el vuelo, Lorenz fue drogada y abandonada en las calles de Nueva York con 50 dólares en efectivo. Lorenz asegura que, después de estos hechos, Pérez Jiménez la contactó en varias ocasiones para ofrecerle ayuda económica y disculparse por lo sucedido. Sin embargo, la relación entre ambos se mantuvo tensa y Lorenz siempre se mostró crítica con el gobierno venezolano y el papel de Pérez Jiménez en él. En la actualidad, Marita Lorenz sigue siendo conocida por su relación con Pérez Jiménez y su increíble trayectoria como espía, sobreviviente de un intento de asesinato por parte de la CIA y su activismo por los derechos de la mujer. Pérez Jiménez, falleció en España en 2001 tras haber vivido exiliado durante varios años.
