Mark-Taylor-Football y Angel-Long se conocieron en un partido de fútbol. Mark estaba jugando como defensa central en el equipo de su escuela, mientras que Angel era el delantero estrella del equipo visitante. A lo largo del partido, Mark y Angel tuvieron varios enfrentamientos, luchando por el control del balón y tratando de anotar goles. Aunque estaban en lados opuestos del campo, ambos jugadores parecían respetarse mutuamente. Después del partido, los dos se encontraron en la línea de salida y comenzaron a hablar. Resultó que ambos eran apasionados del fútbol y habían estado jugando desde que eran niños. Mark estaba impresionado por las habilidades de Angel y le preguntó si alguna vez había considerado unirse a su equipo escolar. Angel respondió que él jugaba en un equipo local y no tenía mucho tiempo para jugar en otro lugar. Sin embargo, después de hablar con Mark, decidió unirse al equipo escolar como jugador invitado durante un partido importante que se acercaba. El día del partido llegó y, gracias a la presencia de Angel, el equipo de Mark logró ganar. Desde ese momento, Mark y Angel se convirtieron en amigos cercanos y compañeros de equipo. A menudo hablaban sobre fútbol y compartían consejos y técnicas para mejorar en el campo. Con el tiempo, los dos se convirtieron en leyendas en su escuela, ganando varios campeonatos y recibiendo reconocimientos por su valentía y habilidades. Y todo comenzó gracias a un partido de fútbol donde se encontraron y forjaron una amistad por la pasión por el deporte.
