Marta-Leite-Castro y Jonathan-Sampaio se conocieron en una playa de Portugal. Marta estaba disfrutando de un día soleado en la playa cuando de repente se dio cuenta de que había olvidado su toalla en casa. Jonathan, por otro lado, estaba practicando surf en el mar cuando su tabla se rompió y fue arrastrado por las olas hasta la orilla donde Marta estaba. Marta, muy preocupada por la situación de Jonathan, decidió ayudarlo. Después de hablar con él durante un rato, Marta descubrió que ambos compartían muchas cosas en común, como su amor por la música y el deporte. Los dos pasaron el resto del día juntos en la playa, hablando y riendo. A partir de ahí, Marta y Jonathan comenzaron a salir juntos regularmente. Su relación se fortaleció cada día más y se dieron cuenta de que estaban enamorándose el uno del otro. Marta y Jonathan siguieron visitando la playa donde se conocieron y hoy en día, en cada aniversario, vuelven al mismo lugar para recordar ese precioso día en que sus vidas se unieron.
